POL ROGER
Ubicada en el corazón de Épernay, su recorrido de más de 170 años de historia es fascinante. Su fundador, Pol Roger, un hombre inteligente y ambicioso, quería introducirse en el mercado británico. En 1855, puso un particular interés en el champagne brut siendo el tipo de vino efervescente favorito de los ingleses. 3 décadas después la notoriedad de la casa era envidiable para muchos.
Y entonces una catástrofe…
En la noche del 23 de febrero de 1900, un estruendo terrible despierta a la familia. Gran parte de la bodega se ha derrumbado… 500 barricas y 1 millón y medio de botellas se pierden para siempre (¡recientemente, en una reforma, ocurrió el milagro de aparecer entre cristales rotos unas pocas botellas intactas!).
Un movimiento solidario sumado al empeño de los hijos Maurice y Georges sacan adelante la empresa familiar que verá como clientes con corona y los restaurantes más emblemáticos de los Champs-Élysées cuentan con sus maravillosos vinos.
Después de la segunda guerra mundial, Winston Churchill marca otro impulso. Gran amante del champagne hace de Pol Roger su favorito. En 1975, se le homenajea con una “cuvée” que llevará su nombre.
Hoy podemos remarcar que Pol Roger es una de las pocas grandes maisons por no decir la única que suma más de la mitad de sus viñedos en propiedad. Aparte del valor económico que eso representa (1 ha en la Champagne dependiendo de donde esté puede alcanzar los 2 millones de €), asegura el total control del fruto de sus viñedos y así seguir siempre con el estilo y la calidad que tanto le caracteriza.